Esta mañana estuve en varias escuelas festejando a D Bosco, pero también el mensaje de plantar papayas estuvo presente. Las fotos hablan . Buen día
Crónica de Sierra Leona
Crónica de las experiencias vividas en Bo (Sierra Leona) por el misionero salesiano Antonio Gutiérrez
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lunes, 1 de febrero de 2021
Festejando a Don Bosco y sensibilizando ..
martes, 29 de diciembre de 2020
PROYECTO PLANTACIÓN ÁRBOLES EN LUNGI (SIERRA LEONA)
miércoles, 21 de octubre de 2020
Caldo de Cenizas
domingo, 11 de octubre de 2020
Esta mañana…
Me levanté a la misma hora de todos los días y me dirigí a la parroquia donde tenía dos misas, pero a donde había invitado a la gente a venir a rezar el rosario por ser la devoción del mes de octubre. Y es que se ha pasado un poco desapercibido, pues las labores de la ordenación, que tuvimos el sábado pasado, nos han hecho dejar otras actividades y una vez que la ordenación ha pasado nos hemos dado cuenta de que hay que recuperar el tiempo perdido.
Durante la semana he ido ambientando la cosa para que
los que quieran participar en el rosario el domingo antes de las misas puedan
hacerlo y hoy, domingo, era el momento para ver lo que había como respuesta.
Tengo la sensación de que la parroquia es un sitio muy
interesante y que nos da la posibilidad de plantear muchos retos para los
participantes en ella y uno es la oración en los barrios y en las comunidades y
no quería que esto se pasara sin tenerlo en cuenta en el mes del rosario.
Cada domingo tenemos tres misas, siete, nueve y once.
Yo tenía las segunda y tercera, pero venía para rezar el rosario antes de la
primera que la diría otro cura.
Cuando llegué a la parroquia las puertas estaban ya
abiertas, pero la iglesia estaba desierta. Estaba amaneciendo, cosa que aquí
sucede muy rápido. Me acomodé en un banco y me puse a rezar esperando a los que
vinieran y el primero que apareció, un señor mayor acompañado de tres nietos.
Con ellos comenzamos el rosario y luego se sumaron algunos más. Concluimos el
rezo y, viendo que tenía mucho tiempo, pues no me tocaba decir la primera misa,
pensé en darme una vuelta y el sitio más socorrido desde la parroquia es la
playa, que está a escasos metros, pero que tiene sus retos.
El terreno en el que se asienta Lungi a lo largo de la
playa es un acantilado, pero que no es rocoso y las embestidas del mar hacen
que vaya cediendo con frecuentes desprendimientos, lo que hace que la franja de
terreno entre el mar y el pueblo sea cada vez más reducida y que árboles y
casas vayan sucumbiendo ante la fuerza del mar.
Llegar a la playa desde la parroquia es una cosa muy
sencilla, sólo hay que cruzar la vía que pasa delante de la iglesia, andar unos
cuantos metros y descender la pendiente que nos lleva a la playa donde hay una
serie de personas fijas en sus labores, desde los pescadores que a diversas
horas faenan con sus redes, hasta las mujeres que se dedican a recuperar
botellas de plástico venidas por el agua (la corriente del mar va de esta parte
y recoge los desperdicios de la capital, hasta los que cultivan sus huertas en
el espacio entre el acantilado y la arena que aprovechan el agua que rezuma
después de las lluvias y que suele ser duradera.
Me encontré con la sorpresa del desprendimiento y la
ausencia de bajada. Pregunté y me indicaron otra nueva vía un poco más alejada,
que me permitió presentarme en el escenario deseado.
Además de las personas indicadas, también me encontré
con unos perros que se hicieron mis amigos y con los que acabé
moviéndome y siendo admitido en un grupo de gente que con el fresco de la
mañana tiritaba un poco a la espera de la faena de tirar de la cuerda que trae
la red desde donde un bote la ha fijado por la tarde.
Ya había un grupo de esta gente que estaban tirando de
la cuerda, tarea larga y fatigosa y con ellos me entretuve y al final también
formaba parte de los que actuaban, pues era yo quien cobraba la cuerda tras el
tirón que los demás aplicaban a la red que venía desde el mar. Es fácil porque
se hace ayudado por uno de los árboles que hay en la zona y que tiene bien
marcadas las señales del paso de la cuerda.
Estuve un buen rato con ellos y me fui enterando de
informaciones que me daban. Conocían a los salesianos desde hace mucho tiempo y
estaban al corriente de lo que hacemos. Yo, como soy nuevo, me voy enterando de
lo que unos y otros me dicen.
Cuando se me hizo el tiempo les dije que tenía rezos y
me pidieron que rezara por ellos, cosa que les prometí y así lo hice
en las dos misas que he tenido esta mañana.
En la iglesia la primera misa se hizo un tanto larga y
pudimos rezar una decena del rosario antes de comenzar la segunda misa. En la
siguiente misa, ya me encargué de mirar la hora y tuvimos tiempo de rezar el
rosario completo. Además les animaba a hacerlo también por la tarde en las
casas o en los sitios de reunión.
En la homilía les hablaba de nuestras relaciones con
Dios que con frecuencia son más de servidores que de amigos, que hacemos las
cosas que están mandadas, pero que no llegamos a descubrir la bondad de un Dios
que nos invita a su fiesta y las ganas que tiene de festejar con nosotros y no
nos vemos como sus amigos… Dios nos llama a la fiesta de la vida, a participar
en su creación y en su Eucaristía … y a veces no somos muy conscientes de ello
y nos comportamos más que como amigos como servidores por un salario…
Terminada la misa, estaba empapado y me vine a casa
para ducharme y cambiar la ropa, no sin antes bendecir una nueva
moto de un parroquiano que la acaba de adquirir. Y en eso se me pasó la mañana.
Hay gente curiosa que quiere saber lo que haces
cualquier día. Hoy he contado lo que hice esta mañana y por la tarde me he
entretenido en ponerlo por escrito, no sin problemas, porque tengo el ordenador
que me falla y no logro abrir ventanas, utilizo las viejas, no puedo guardar,
lo hago a bote pronto y… espero que lo pueda enviar antes de que lo pierda…
Tengo que decir que rezo por vosotros, todos y cada
uno, lo mismo que hago cada día y lo mismo que hice esta mañana por los que
esta semana me han pedido oraciones y por los pescadores con los que me
entretuve en amena conversación esta mañana temprano.
Buena lectura a todos y los mejores deseos y las
bendiciones de Dios.
Antonio. Lungi, 11-10-20