Por lo menos he dormido que no es
poco y me levanto con ganas de hacer algo. La luz se va y viene y se vuele a
irse. No hay muchos para la oración pero sí hay mas durante la misa a los que
invito a rezar por el papa que nos lo ha pedido y a tener consciencia de que
los ángeles custodios nos acompañan.
Después de misa comienzo a sudar y me
voy a la cama, Me paso la mañana en cama, leyendo, durmiendo y rezando. Me
levanto a la hora de la comida. Vienen Edwin, el salesianos que dijo la misa el
domingo y que se prepara para volver a Liberia. Nos acompaña también en la
comida un cura espiritano que ha venido con Christopher y hay un rato de
animada conversación sobre las actitudes del nuevo gobierno frente a la
corrupción en diversos campos.
Me voy a reposar, aunque no duerno, pero por lo
menos descanso, leo y a una cierta hora me levanto para salir a dar una vuelta.
Me piden que les bendiga un frasco de aceite de oliva, que aquí es carísimo.
Estoy hablando un rato con la persona y después voy a dar un paseo, vuelvo a la
iglesias, leo, rezo, participo en la reunión que el grupo de liturgia tiene los
martes y vamos al rosario.
Hoy ha habido bastantes más que ayer
en el rosario y siguen siendo los jóvenes los más numerosos.
A todos les animo
a perseverar en la oración que el papa nos ha pedido para este mes de octubre.
Ibrahim ha llegado de Freetown con
bastante retraso, le invitamos a cenar y después charlamos un rato.
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