Voy a decir la misa a Nagoyon. Es de noche hasta
cuando acabamos la misa y hay un buen grupo de gente que viene de pueblos de
alrededor y en algunos no hay camino. Finalizada la misa me piden si puedo
llevar a los alumnos de la escuela a visitar al maestro que está en un
posoperatorio en Tikonko. Además de los que venimos dentro de la cabina, seis
personas, en la parte de atrás entran más de veinte alumnos. Saludamos al
maestro. Le han traído unos plátanos como regalo y me vengo para casa después
de haber apalabrado los trabajadores para la finca para el viernes.
Me paso la mañana en el ordenador y con no mucho
éxito. Intento poner en orden archivos y direcciones, además de escribir algún
correo que luego no salen porque no hay conexión.
Después de comer me voy a dar una vuelta a ver lo que
hacen en el motor del camión y también me paso por la parroquia vecina para
pedir audiencia para consultar el libro de bautismos. Me dicen de volver mañana.
Hay retiro para los jóvenes y me paso un buen rato en
la iglesia primero en la charla y luego confesando, actividad muy dejada de la
mano y que intentamos recuperar.
Seguimos con la luz del generador y con muy mala
conexión.
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