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domingo, 31 de enero de 2016

31 de Enero de 2016

Domingo

Y hemos llegado al final del mes y… henos aquí dispuestos a celebrar la fiesta de nuestro fundador Don Bosco.
La ocasión es admirable y la suerte es inmensa. Pensar que por primera vez el sucesor de Don Bosco va a celebrar esta fiesta fuera de Turín y que ha querido celebrarla con nosotros… Y le damos las gracias a Dios y a Don Bosco por tanta bendición como recibimos.
Por la mañana tenemos la oración en la capilla y a continuación el desayuno, y después nos vamos hacia la iglesia en la parroquia donde ya la gente nos espera. Hoy la iglesia es pequeña para tanta gente que está presente y nos acompaña a los salesianos en nuestra fiesta. Todos los salesianos trabajando en el país estamos presentes. Somos catorce. Además del provincial que acaba y el que comienza. También ha venido un salesiano de Nigeria y el Rector Mayor y su secretario.
La misa dura tres horas, pero como dice el Rector Mayor, es aquí en África donde eso pasa y no ocurre nada: los críos aguantan sin moverse y los adultos no nos damos cuenta de que el tiempo pasa, porque estamos celebrando nuestra fe y lo hacemos sin prisa.
El Rector Mayor ha presidido la eucaristía y lo ha hecho por primera vez en inglés. Bastante conseguido para mi modo de ver, pues tengo la experiencia de haber vivido la misma situación en varias lenguas y en distintos lugares y es algo que recuerdo con cierta nitidez… Mi primera misa en francés un domingo ante los catecúmenos en Parakou… La primera vez que intenté decir misa en baribá en Parakou… La primera misa en mokolé en Kandi… La primera vez que dije misa en moba en un pueblo del norte del Togo… La primera misa en mende en Tikonko aquí en Sierra Leona… Son sensaciones que conservo muy nítidas a pesar del paso del tiempo…
Cuando tienes un texto delante de ti para leer en voz alta y ves todos los problemas a los que tienes que hacer frente, y a medida que vas leyendo, te va faltando el aliento y te quedas sin aire en los pulmones y te sientes sin fuerzas, y sudas y ves que, a pesar de las veces que lo has repetido y lo has preparado, no es aún suficiente, y la cosa no te da para más y te ves como David contra Goliat…
Pero cuando acabas la misa, tienes la sensación de haber dado un paso importante en tu relación con la comunidad, pues hasta los críos que te tenían un cierto miedo, ahora se te acercan y te abrazan; y los adultos te toman como uno de los suyos… Es algo que tengo grabado en la memoria y que podría dar muchos detalles de cada una de estas experiencias inolvidables que sólo vives aquí…
Después de la misa nos sacamos la foto los salesianos presentes y luego hubo comida en el terreno de la iglesia para todos los presentes y los salesianos vinimos a casa y comimos juntos en el comedor. Fue también un rato muy agradable de compartir experiencias. En la mesa se intenta hablar italiano, pero los anglófonos entienden bastante poco y se opta por hablar español y traducir un poco.
Hubo un rato de descanso que aproveché para ver el correo y las noticias. Me decían que en Pamplona nos han recordado y han pensado en nosotros, la fiesta de Valdocco… Y, como decía el Rector Mayor en la homilía, hay ciento treinta y dos Valdoccos en el mundo (los países en los que los salesianos estamos presentes) y cada uno está celebrando la presencia de Don Bosco con nosotros y tratando de hacer realidad su sueño.
Nos encontramos luego los salesianos con los demás miembros de la familia salesiana, los cooperadores, los antiguos alumnos y los cooperantes. Es una realidad que la familia es aún pequeña, pero hay que darle tiempo para que crezca y las cosas irán apareciendo.
Junto con los miembros de la familia salesiana rezamos el rosario en procesión y delante de la estatua de María Auxiliadora nos dio las buenas noches y después compartimos también la cena en el patio de atrás de la casa. Alrededor de sesenta nos encontramos presentes. A medida que se iba acabando, nos fuimos dispersando, unos por tener que ir al ferry para ir a La capital y otros hacia sus casas.
Estuve hablando un momento con el secretario del Rector Mayor y le hice ver una cierta preocupación por su salud, pues me da que la habitación en la que duerme es un centro de energía negativa y eso le puede afectar a la salud. Me dijo que se lo comunicará mañana y yo le prometí tenerles presentes de forma especial en la oración.

Final de un día, final de un mes en el que hemos vivido tantas experiencias y tanas sensaciones que nos invitan a agradecer a Dios lo que de Él recibimos, lo que estamos viviendo y las ilusiones que tenemos de seguir en la brecha en la familia de Don Bosco.

sábado, 30 de enero de 2016

30 de Enero de 2016

Sábado

Decimos la misa en la capilla con la presencia de los salesianos y luego el día sigue, pues el Rector Mayor va a la capital y nosotros nos pasamos el día en Lungi con los jóvenes del movimiento misionero.
En Freetown hay una oración con los jóvenes de la cárcel y un encuentro con los niños y niñas de la calle, con los huérfanos del ébola, y con los colaboradores; intenso y bien preparado. Y luego la vuelta en el ferry y la oración de la tarde con los salesianos, la cena y el encuentro con los jóvenes del grupo misionero que acaba con las buenas noches, un momento de agradecer a todos y cada uno lo que han hecho y lo que han presentado en la velada.

Posteriormente nos encontramos un momento en la sala de estar y se comenta lo vivido durante la jornada, intensa e impactante en todos los encuentros. El Rector Mayor ha querido estar con nosotros y vivir el día de D Bosco aquí y así mostrar su cercanía después de las experiencias vividas con el ébola.

viernes, 29 de enero de 2016

29 de Enero de 2016

Viernes

Decimos la misa en la capilla con la presencia de los salesianos y luego el día sigue, pues el Rector Mayor va a la capital y nosotros nos pasamos el día en Lungi con los jóvenes del movimiento misionero.
En Freetown hay una oración con los jóvenes de la cárcel y un encuentro con los niños y niñas de la calle, con los huérfanos del ébola, y con los colaboradores; intenso y bien preparado. Y luego la vuelta en el ferry y la oración de la tarde con los salesianos, la cena y el encuentro con los jóvenes del grupo misionero que acaba con las buenas noches, un momento de agradecer a todos y cada uno lo que han hecho y lo que han presentado en la velada.

Posteriormente nos encontramos un momento en la sala de estar y se comenta lo vivido durante la jornada, intensa e impactante en todos los encuentros. El Rector Mayor ha querido estar con nosotros y vivir el día de D Bosco aquí y así mostrar su cercanía después de las experiencias vividas con el ébola.

jueves, 28 de enero de 2016

28 de Enero de 2016

Jueves

Celebramos a Santo Tomás en la misa y le pedimos nos ayude con su sabiduría y con su oración ante el Señor. Después de la misa salen los jóvenes del grupo misionero hacia Lungi. Ha venido a buscarlos Emmanuel de Freetown y el resto van en el vehículo de casa con Samuel. Buen viaje y mejor estancia.
Me quedo solo en casa a la espera del contenedor, algo que me preocupa un poco, pues no tengo casi noticias, pero Andreas me ha prometido que viene y confío en su palabra y en que si hay alguna cosa que no funcione, me avisará.

El día va transcurriendo tranquilo y me siento aliviado cuando Andreas me llama para confirmarme que mañana por la mañana el contenedor estará en Bo y le podremos descargar.

miércoles, 27 de enero de 2016

27 de Enero de 2016

Miércoles

Seguimos con los problemas de luz, pero eso no impide el que digamos la misa con la linterna y hagamos las cosas lo mejor que podemos. Siguen viniendo numerosos a la misa y les seguimos animando a que vengan y traigan a otros.
El catequista, que también es sastre en sus ratos libres, está haciendo uniformes para los críos de las escuelas. Es una de las cosas típicas de aquí, cada escuela suele tener su uniforme, cosa que a veces no va más lejos, pues el nivel educativo es muy bajo; pero por lo menos color y gusto por algo ya tienen.
Me sigo encontrando con el grupito de los que preparan el libro de oraciones en mende y veo que van trabajando. Alguien me ha regalado una papaya, que por cierto está muy buena. Me he dado cuenta cuando me la ha presentado y le he dado las gracias por el regalo.
Se confirma que el contenedor estará aquí el jueves y voy preparando el ambiente para ir buscando quien nos ayude a descargarle.

Por la tarde voy a Towama a ver a los que estamos preparando para el matrimonio. Como cada encuentro, hablamos unos momentos y rezamos para que las cosas se vayan preparando en la presencia de Dios. Les he dicho que la comunidad va a cambiar sensiblemente y que intentaré hacer de forma que no haya gastos especiales para que otros se animen también a dar el paso.

martes, 26 de enero de 2016

26 de Enero de 2016

Martes

Seguimos con los mismos problemas de falta de luz y el generador tiene problemas, con lo que la linterna sigue siendo la solución inmediata. Esperemos que no sea por mucho tiempo.
Después de misa me he encontrado con un señor que está jubilado, pero con muchas ganas de hacer algo en la parroquia. Creo que pertenece a algún grupo parroquial, pero cuando me dice que ha sido profesor en la uni y que es mende, lo primero que le sugiero es hacer un libro de oraciones en su lengua, algo que toma con ilusión y hoy me ha presentado también algunos más que pueden ayudarle. Es algo que hace tiempo que estaba intentando hacer y creo haber dado con la persona o personas apropiadas. Veremos a ver si la cosa sale adelante. Por lo menos interés no les falta.
Les he pasado las fotocopias de los libros de oraciones antiguos que he podido encontrar en su lengua y cada uno ha elegido uno para ir leyendo y preparando algo. Se reunirán en la semana y la vez siguiente me informarán de lo que han hecho. También es interesante que saben utilizar el ordenador y que piensan en ello para hacer el trabajo.
Durante la mañana viene el carpintero y repara algunas mosquiteras en las ventanas de lo que nos sirve de capilla, que estaban muy deterioradas mientras Samuel ayuda a Stephen en un trabajo que tiene que presentar en la uni.
Por la tarde hay ensayo de los que van a ir al encuentro con el Rector Mayo y Andreas sigue llamando informando sobre el contenedor. Habrá un día de retraso, pues hoy es fiesta y no se trabaja. Llegará el jueves por la tarde y lo descargaremos el viernes por la mañana. Esperemos que no se retrase y que nos dé tiempo para estar presentes para la llegada del Rector Mayor. Andreas se ha ofrecido para venir y estar presente en la descarga y luego llevarme a Lungi. Ya veremos a ver en lo que acabamos.

Seguimos sin luz y la conexión es difícil, pero por lo menos ha habido un rato y he podido enviar correos y leer las noticias.

lunes, 25 de enero de 2016

25 de Enero de 2016

Lunes

Celebramos la conversión de san Pablo y el final de la oración por la unión de los cristianos. Seguimos sin luz y tampoco el generador es capaz de funcionar, así que el último recurso, la linterna que es lo más seguro y práctico.
Después del desayuno, Samuel que no se siente bien, descansa un rato y luego ya va mejor. Yo voy a visitar al pastor metodista que nos visitó ayer, pero está en un funeral.
En casa paso la mañana lavando ropa, preparando lecturas y pensando en soluciones para la llegada del contendor, sitios a ocupar, donde almacenar las cosas. Andreas llama y anuncia que el contenedor sigue su curso y que el señor de los pozos pasará por aquí hoy, cosa que hace por la tarde, y va camino de Liberia.
El señor de los pozos, John, es un americano que lleva varios años trabajando en pozos aquí y me da una buena impresión, lo mismo que me dice él que ha recibido de nosotros, en especial el ver la gente de los pueblos muy motivada para el trabajo.


domingo, 24 de enero de 2016

24 de Enero de 2016

Domingo

Como cada domingo, salgo muy temprano hacia los pueblos y hoy llego a Nagoyon antes de que amanezca. La realidad es que parece que las tardes son más largas, pero por la mañana se hace de día más tarde.
En fin, que a las siete en punto había unos pocos en la iglesia y con ellos hemos comenzado la oración. Los demás han ido llegando después. Y es que levantarse temprano y sentir el frío que sienten ellos no es cosa fácil de hacer. Y  la mayoría de la gente viene de los pueblos de los alredecdores.
En el pueblo siguiente, aunque sea más tarde, siguen teniendo los mismos problemas de puntualidad y seguimos insistiendo en el tema, además de presentar la importancia de la lectura personal del Evangelio como una necesidad que cada uno de nosotros, cristianos tenemos que hacer nuestra. Les recuerdo cómo el Papa insiste cada vez que tiene ocasión en la lectura de la Palabra de Dios.
En Towama las cosas no son muy diferentes. No hay mucha gente y se van haciendo presentes algunos estudiantes de la universidad. También les invito a ser testigos de la presencia del Espíritu en nosotros y anunciarlo a los demás, cosa fácil de decir, pero la práctica es diferente.
Tenía que venir a verme alguien que va a trabajar en los pozos, pero me ha enviado un mensaje que no vendrá porque ha tenido problemas con el vehículo. Para mí más que crearme problemas, yo creo que es una solución, pues de otra forma estaría muy apretado de tiempo, pues también tengo una misa por un difunto por la tarde a las cinco en otro pueblo y el que no venga me permite tener un rato de descanso antes de ir.
En la parroquia la cosa ha ido normal. Hay mucha gente. Ha venido Daniel de Lungi a decir la misa y después de comer ha salido de estampida, pues le esperaba el viaje de vuelta a Lungi.
También ha aparecido el pastor de la iglesia metodista de en frente de la parroquia. Al principio nos ha sorprendido un poco su actitud de suma confianza, pero luego hemos visto que es así su relación con el párroco anterior y hemos tratado de seguir en la misma línea.
Seguimos sin luz y sin conexión y seguimos a la espera de que venga. Mientras tanto tengo tiempo para leer el libro electrónico que es una maravilla, en especial para estos momentos en los que no hay luz y no tienes muchas cosas que puedas hacer.

El veinticuatro y la fiesta da san Francisco de Sales pasan un poco en sordina. Esperemos que el año que viene las cosas estén más claras y podamos dar a cada fiesta la importancia que se merece.

sábado, 23 de enero de 2016

23 de Enero de 2016

Sábado

Joseph se ha ido temprano. Le ha llevado Samuel a la estación para coger el vehículo. Nos llama más tarde para hacernos saber que le viaje ha sido bueno.
Seguimos sin luz y con momentos de conexión a internet aislados, pero por lo menos los tenemos de vez en cuando. Me dedico a estudiar un rato y a preparar las lecturas del domingo que son complicadas.
Durante la mañana llama Andreas, el gerente de la oficina de desarrollo para hacernos saber que el contendor estará aquí la semana que viene, aunque no sabe el día fijo aún. Para nosotros es una gran alegría el saber que las cosas avanzan y podremos tener pronto aquí lo que esperamos desde hace tiempo.

Samuel ensaya con la gente que va a ir a Lungi y yo voy a los pueblos para la reunión de las parejas. Lo que empezó como un grupito sin importancia, ahora va creciendo hoy ha habido seis parejas completas y varios observadores. Entre las parejas nuevas hay los que vienen de Tikonko y que quieren acabar haciendo un grupo ellos también, además de los que llegan de Balei, el pueblo que se ve más receptivo por ahora. Es una alegría disfrutar con las comunicaciones que hacen, cómo marido y mujer se entienden, no se pelean y viven una experiencia que no imaginaban fuera posible vivir antes, y por eso le doy las gracias a Dios por lo que estoy viviendo.

viernes, 22 de enero de 2016

22 de Enero de 2016

Viernes

Hoy es la fiesta de Laura Vicuña. Como estamos en situación de provisionalidad, no hemos querido hacer mucho hincapié en ella, pero por lo menos la hemos nombrado en la plegaria eucarística.
Seguimos sin luz y utilizamos el generador del centro de pastoral, pues la luz que ayer vino, cuando se fue, nos ha dejado por largo tiempo. También hay problemas de conexión.
Hay ecos de que el contenedor está a punto de llegar, pero no estamos seguros. Seguimos esperando noticias ciertas y aquí vamos preparando los sitios donde vamos a almacenar las cosas que nos vienen.
Tenemos una reunión comunitaria para aclarar algunos puntos sobre la visita del Rector Mayor y cosas de la casa y de la iglesia. Nos lleva un buen rato, pero estamos contentos del trabajo que vamos haciendo y de ver que creemos que vamos por el buen camino.
Joseph está preparando su partida y visita a unos y otros para dejar organizadas las cosas en nuestra ausencia. Samuel sigue con los ensayos de los que van a ir a participar en la visita del Rector Mayor. Yo me dedico a hacer cuentas, un poco de limpieza, pues el polvo nos invade y después de comer vamos a los pueblos. Samuel está en Gbalehun y yo voy a Cassama. Lo normal del momento, no mucha gente y esperando a ver qué haces… Y tienes que animarles y hacerles ver que son ellos los que pueden hacer que las cosas cambien en su medio.

Cuando volvemos a casa es tarde. Estamos cansados. Cenamos y, después de un momento de charla nos retiramos a dormir, que mañana nos espera día ocupado.

jueves, 21 de enero de 2016

21 de Enero de 2016

Jueves

Tuvimos luz por la noche y al levantarnos, algo que ya se nos hace inusual, pero que aceptamos contentos. También ha habido luz durante la misa y toda la mañana, pero por la tarde se fue de nuevo.
Hoy ha habido conexión y ha funcionado regularmente. Hemos ido a ver a los que nos han vendido la conexión y promesas muchas, pero la realidad es la que es y es lo que tenemos. He estado más de una hora esperando a que me sirvieran carburante para el vehículo. Es ahora cuando suele haber problemas de abastecimiento y fui a una gasolinera que me trataron muy bien, pero con el depósito a medio cargar, se acabó el combustible del depósito y después de una espera de diez minutos apareció el camión cisterna, que empleó su tiempo en vaciar el contenido para llenar el depósito y después volvieron a reanudar el servicio en el punto donde nos encontrábamos. Esperé largo tiempo, pero por lo menos sé que me puedo mover tranquilo, que no me falta carburante.
Luego fui a Mattru, el pueblo al que suelo ir por la tarde, pero quería encontrar al maestro y me saludó muy contento, pues todos los alumnos del último año de la escuela acababan de recibir las notas y todos habían aprobado. Le felicité, nos hablamos un rato y quedamos de encontrarnos de nuevo el domingo, pues hay alguien que ha muerto y rezaremos por su eterno descanso.
Vino el carpintero y trajo unos presupuestos para algunos trabajos a hacer en la casa, reparar, cambiar, arreglar, en diversos sitios y hacer una nueva cama más ancha que la que tiene el párroco, pues a los de aquí les gustan las camas grandes.

Nos han caído unas gotas de lluvia, algo a lo que todavía me tengo que acostumbrar, pues en los sitos donde estaba antes teníamos “el tiempo asegurado”, es decir, ni gota de agua de noviembre a mayo y todos los días sol. Aquí las cosas son diferentes, el calor es menor, pero la humedad es mucho más grande, incluso ahora que estamos en momento de sequía se nota la presencia de la humedad. También la vegetación es diferente y la forma de trabajar la tierra distinta. Y a todo hay que acostumbrarse y siempre aprendiendo.

miércoles, 20 de enero de 2016

Una Casita..

Una casita nueva…                                                               20-1-16
Vivimos en una nueva casa, lo que no quiere decir que la casa es nueva a estrenar, sino que la casa es nueva a reparar.
Se nos ha ofrecido una parroquia en la ciudad de Bo y lo lógico es que nos acomodemos en la casa aneja a la parroquia, la casa parroquial. Es una casa buena y bien construida, con largos años de vida y con una gran necesidad de mantenimiento, algo que  no se le ha hecho durante mucho tiempo.
Desde los cimientos al tejado, se necesitan remodelaciones, pero si empezamos por el tejado, y espero que no sea “comenzar la casa por el tejado”, sino comenzar a reparar desde el tejado, es algo que necesita uno nuevo, aunque a lo mejor podemos esperar un poco, tapar unas cuantas goteras y comenzar por algo más perentorio, como es el agua.
No tenemos agua corriente. Lo que quiere decir que el simple gesto de girar la mano apoyada en el grifo, es algo que aquí se puede hacer, porque grifos y tuberías hay, pero no tiene efecto porque hace mucho tiempo que se han abandonado. Se necesita rehacer todo, desde el depósito del agua hasta todas y cada una de las tuberías de conducción o de desagüe.
Estamos en la misma situación con respecto a la electricidad. Los cables son antiguos y están tan deteriorados que mejor pensar en cambiar que en reparar para unos días, pues hay que cambiar no sólo los cables, sino también bombillas, enchufes…
Con respecto a la pintura, podemos pensar en la misa necesidad, de algo que ha sido pintado hace mucho tiempo y que necesita una nueva capa de refresco.
Igualmente podemos pensar en los suelos, necesitados de una renovación a fondo. Son de cemento y encima tienen un sintasol, pero tan deteriorado que es necesario pensar en ponerlo de nuevo o, mejor, unas buenas baldosas.
Esto para comenzar, porque estoy seguro que a medida que vayamos entrando en materia, iremos viendo nuevas necesidades y nuevos retos.
Todo esto puede ser una queja, una petición de ayuda, un reto para nosotros… Y creo que es así como lo aceptamos, lo mismo que aceptamos que tenemos que construir una casa  para una comunidad que se instalará en Towama, el sitio donde tenemos un terreno; lo mismo aceptamos que lo que se nos ha presentado ahora necesita una remodelación y habrá que armarse de paciencia y dar los pasos para realizarlo.
Unas fotos pueden ser de mucha ayuda…
                                                              
Gracias si alguno quiere y puede colaborar.  Antonio.
Fachada de la casa

Parte trasera de la casa, depósito de agua y tuberías a renovar

Fachada de mi habitación y tuberías

Parte trasera de la casa. Patio interior

Tuberías , acaban...¿?

20 de Enero de 2016

Miércoles

Rezamos en la capilla del Santísimo. No hay luz y las cosas no son fáciles cuando quieres leer el breviario, pero se hace lo que se puede. La gente sigue viniendo en buen número a la misa y hoy además de rezar por la unidad, celebramos a un santo nigeriano que fue cisterciense y a quien en países anglófonos tienen devoción.
Nada más acabar el desayuno vamos a visitar una escuela. Estamos intentando ver si el número de alumnos aumenta y el trabajo que hacen los maestros, además de preparar las cosas para el comienzo del trabajo en el pozo. Hay buena disposición y unos cuantos padres de alumnos han venido para seguir el trabajo de limpieza de la parcela de la escuela. Hay más alumnos que la semana pasada, y aún esperamos más.
También he encontrado al jefe tradicional de la zona y nos hemos entendido para un proyecto que me han presentado de plantar árboles. Seguiremos viendo las posibilidades. Y de paso hemos ido a otra escuela en la que no habíamos visto al director y nos hemos puesto de acuerdo para poder encontrarnos con otros directores de otras escuelas.
Por la tarde Samuel tiene reunión con un grupo de los que se preparan para ir al encuentro con el Rector Mayor. Joseph tiene varias reuniones con grupos de la parroquia y yo voy a hacer compras y visito en Towama la pareja que se prepara para el matrimonio en pascua. Como de costumbre, rezamos en su casa y hoy han llamado a los críos que estaban por allí, imagino sus nietos, y con devoción hemos rezado juntos y al final les he dado la bendición.

Estamos sin luz y sin conexión y esperando a ver si por suerte viene, pues las baterías de los aparatos están descargadas.

martes, 19 de enero de 2016

19 de Enero de 2016

Martes

Nos levantamos sin luz, pero pronto hay un generador del centro de pastoral de al lado que comienza a funcionar y estamos enganchados, por lo que tenemos luz en la iglesia. La gente sigue viniendo y hoy rezamos por la unidad de los cristianos, algo que no hay costumbre de hacer por aquí. También aprovecho unos momentos para hablar de Don Bosco y decirles que al final de mes lo celebraremos, pero este año de una manera un poco especial, pues no estaremos presentes en la parroquia, ya que viene el Rector Mayor a visitarnos y estaremos en Lungi celebrándolo juntos.
Me levanto en buena forma. La garganta está un poco mejor y no siento los problemas de ayer, pero sigo sudando y empapando camisetas, aunque me siento con buen ánimo y deseando que la cosa se pase.
Como hay conexión, recibo y envío correos, leo noticias y pongo la crónica al día. Y Joseph llama para decirnos que no llegará tan pronto como pensaba, pues alguna cosa le ha hecho retrasarse, lo que me hace pensar que visitaré la escuela que quería visitar esta tarde, mañana, si es posible.
Joseph llega a media tarde. Samuel está preparando sitios para almacenar las cosas del contenedor, lo que quiere decir vaciando y limpiando almacenes. Le ayudan algunos jóvenes que han venido dispuestos a la faena.
 Yo voy a cortarme el pelo a un sitio muy cerca de casa, pero que está al lado de la carretera y me toca una buena ración de polvo del tráfico que pasa, lo que quiere decir que seguiremos con la ronquera… Pero la conversación que tuve con el peluquero y algunos más que se unieron es muy significativa: “Todos queremos irnos a Europa…” No sé si somos conscientes del mensaje y qué estamos dispuestos a hacer… Lo que se hace hasta ahora creo que no es una buena solución y, algún día tendremos problemas ante tanta gente que quiere y no puede o no les permitimos o les cortamos cualquier ilusión…

He logrado hablar con Skype, aunque la conexión no era buena, pero por lo menos nos hemos logrado entender.

lunes, 18 de enero de 2016

18 de Enero de 2016

Lunes

Amanecemos sin luz y en la iglesia funciona el generador. Hoy hemos ido a rezar a la capilla del Santísimo, que está en la sacristía y poco a poco vamos a ir buscando nuestro sitio para encontrarnos para rezar y para estar en comunidad.
La voz me sigue fallando y a la hora de hablar se nota mucho que estoy ronco y también sigo sudando y empapando camisetas. Después del desayuno me acuesto un rato y duermo, pero luego salgo a la calle porque creo que también al catarro se le despeja con una salida. He ido a buscar a un señor que trabaja en el Ministerio y que es quien marca los terrenos en los pueblos. Juntos queremos ver al obispo para decidir sobre los papeles a hacer y logramos encontrarnos y decidir. Mañana empezarán a hacerse las cosas.
También he intentado una nueva conexión a internet y es toda una aventura, para empezar el encargado no está presente en la oficina a media mañana y me dicen que vuelva más tarde, cosa que acabo haciendo, pues he intentado conectarme en un ciber y no hay forma de recibir los correos. Cuando vuelvo el encargado está, pero no hay conexión. Tengo que aceptar volver a casa y ya me llamarán cuando me puedan conectar… Y así se funciona por aquí.
Por suerte más tarde de las tres he logrado conectarme y, aunque la cosa no es un lujo, por lo menos funciona. Por lo noche logré hablar un rato con Loli, aunque se cortó varias veces y, aunque lo intenté con más gente, no lo logré. Esperemos más suerte otro día.
Samuel ha tratado de preparar uno de los cuartos de abajo para ser nuestra capilla y allí hemos rezado por la tarde, aunque por la mañana lo hagamos en la sacristía de la iglesia, aunque no sea más que porque la gente lo sepa y nos vea que rezamos.

Sigo sudando y con problemas de voz, pero no tengo fiebre y trato de hacer la vida normal, aunque me siento flojo y no fuerzo la máquina.

domingo, 17 de enero de 2016

17 de Enero de 2016

Domingo

Hoy madrugo para encontrarme con los que van a trabajar en el pozo en Baley. Llego un rato antes y comienzo a pasarles imágenes en el ordenador y todos están más que atentos y tratan de comprender lo que les enseño, que es lo que he hecho con otros en otros sitios.  Está amaneciendo en este momento.
Les sorprende que les diga que son adultos y que no les puedo tratar como a niños, que a un niño se le da un caramelo, pero a un adulto no se le regalan las cosas. Y creo que se sienten a gusto cuando les digo que juntos podemos hacer muchas cosas; que yo quiero estar con ellos, pero no para hacer el trabajo que ellos tienen que hacer, sino para hacerles ver que ellos son capaces de realizarlo, y que soñar siempre es posible… Algunos sonríen, quiero imaginar que complacidos.
Les hago ver que llevo tiempo viniendo al pueblo y a la escuela y que hoy he venido para decirles que juntos podemos hacer algo bueno para todos y a todos se nos invita a colaborar. También sonríen cuando les hago referencia a los maestros, que son dos parejas que vienen regularmente a las reuniones de matrimonios y les hago ver que para ellos son también un modelo que pueden imitar. Creo que están sorprendidos de la forma en que les hablo, algo que no creo que se lo esperaran y también pienso que podremos hacer un buen trabajo juntos.
Concluimos el encuentro y me voy a Nagoyon para la misa. Llego un poco antes de las siete. Ya me han visto pasar y saben que estoy al llegar y hay unos cuantos del otro pueblo que han aprovechado para venir en el vehículo, con lo que podemos empezar la misa a la hora con un cierto número de presentes. Los demás irán llegando.
En todos los pueblos intento poner de relieve la institución del matrimonio y compartir  las experiencias que estoy viviendo con ellos y así seguimos sembrando. El vino nuevo y bueno es el mensaje de Jesús y la oración nos ayuda a descubrir, escuchar y poner en práctica este mensaje.
Las máquinas están nivelando la pista y el trozo que ya está hecho, aunque tiene mucho polvo, no tiene tantos baches y te permite avanzar más rápido, lo cual no deja de ser una sensación agradable.
En el último pueblo intento abreviar, pues tenemos reunión del consejo parroquial en casa y quiero estar presente. También hay reunión del consejo en Towama y tengo que optar, pues también me gustaría estar presente.
En casa la reunión del consejo se alarga hasta las dos y media, pero es importante ver a los participantes, hay casi una veintena y los temas a tratar. Y cuando acaba vienen a ver nuestra casa y, como nos han traído comida abundante, la compartimos con ellos y se crea un buen ambiente.
Joseph acabada la reunión coge la carretera, pues hoy tiene reunión para la preparación de la llegada del Rector Mayor y nosotros nos quedamos en amigable charla con los que comen, que a medida que acaban, se van retirando a sus casas.

Me echo un buen rato la siesta. Sigo sudando y tosiendo, pero es lo normal para la época que estamos pasando. Espero que se acabe pasando. Me acuesto pronto. Leo un buen rato y logro dormir bien y con la sensación de estar en mejor forma.

sábado, 16 de enero de 2016

16 de Enero de 2016

Sábado



Tratamos de recuperar el ritmo normal de la misa y la gente viene numerosa. Después del desayuno tenemos reunión comunitaria que nos lleva un par de horas. Hay muchas cosas que programar y planes que cambian.
Con respecto a la casa vemos que lo primero que queremos atacar es la cuestión del agua, pero no tenemos las cosas muy clara en el cómo, pues se presentan opciones diferentes. Hacemos un intento de horario para la oración y las comidas y el resto iremos viendo la forma de responder según necesidades.
Hablamos con el representante de internet y nos propone varias opciones. El lunes optaremos por la que mejor nos convenga. Esperemos tener conexión en casa. Hoy no ha habido tiempo de intentar conectarse, pues se a echado encima la hora de ir a los pueblos.
La reunión de parejas es bastante interesante. Hay cinco parejas competas y tres más medias, pero lo que es de destacar es la alegría que tienen las que acaban de llegar y cómo hablan de la experiencia que están viviendo como algo muy positivo.
Tras la reunión voy a otro pueblo donde hemos quedado de encontrar a los que van a trabajar en el poco y sensibilizar al personal, pero no están. Me proponen hacer la reunión mañana, pero el problema es el escaso tiempo que tengo libre, que es sólo al principio de la mañana.  Me han prometido estar presentes.

Me siento cansado y sigo sudando y pienso que en la pista respirar polvo es algo que no puedes evitar y hace que te vuelvan los síntomas que creías haber superado. Paciendia y a seguir con lo que se pueda.

viernes, 15 de enero de 2016

15 de Enero de 2016

Viernes


Como Joseph iba a estar en la misa de la noche, le he dicho que por la mañana en la parroquia podía decir la misa yo y él podía dormir un rato más y así lo hemos hecho. Ha venido un poco menos de gente que ayer, pero es normal, pues algunos irán luego a la misa en la catedral.
Preparamos cosas en previsión de que algunos salesianos puedan llegar para la misa-funeral y vengan a desayunar. Yo me voy para la iglesia, pues hay una oración de la mañana que empieza a las diez. El tiempo que estamos por allí vemos el cadáver en la caja que está expuesto y que se cierra en el momento en que va a comenzar la misa.
Hay alrededor de una centena de curas para la misa y participan tres obispos. Los fieles hoy son tan numerosos que hay muchos fuera. Es la primera vez que veo que la catedral está a rebosar y no tiene sitio y hay tanta gente fuera. La ceremonia es razonablemente larga, en especial una hora y media los panegíricos de despedida. Estamos hasta las dos y media. Ya es algo a lo que estoy acostumbrado y sé que  el tiempo que estamos en la iglesia no es tiempo mal empleado.
Ha venido mucha gente y es que este cura era muy conocido y apreciado. Ha muerto de cáncer. Para todos los de fuera se ha preparado comida, algo a lo que no espero a ver el ambiente, ya que tengo ganas de llegar a casa y cambiarme la camiseta empapada de sudor que llevo encima y descansar un rato.
Cuando me levanto, los otros ya han llegado y están comiendo. Me sumo a ellos y charlamos en amable conversación sobre diversos temas y más tarde se suman algunos de los salesianos que han venido de Lungi. Los de Freetown han salido de inmediato.
También tengo tiempo para subir unos cubos de agua a la habitación y luego ir a conectarme a internet para ver las noticias y ahí me entero de que ha habido un caso de ébola en el norte del país y que está confirmado. Esperemos que la cosa esté controlada…
Un tema que viene a la conversación es la vista que a final de mes hará el Rector Mayor y para la que nos estamos preparando y haciendo los últimos retoques al programa.

Estamos sin luz y cuando los salesianos se van a sus casas, nosotros rezamos el rosario y nos vamos a descansar, pues no estamos muy en forma ninguno de los tres. Por  la noche la luz viene un rato y nos permite por lo menos cargar las baterías de los aparatos.

jueves, 14 de enero de 2016

14 de Enero de 2016

Jueves

Sigue habiendo buen número de personas para la misa. Hoy pasan de sesenta. A los que han venido para rezar el rosario les doy un folleto en el que se explican los misterios, pues siguen rezando los gozosos el jueves. Me lo agradecen y prometen el jueves que viene rezar los misterios luminosos.
Sigo con problemas de voz y es que con el polvo y la debilidad en la que me encuentro, cualquier cosa te puede llegar. Sigo sudando, pero por lo menos no creo tener fiebre. Hago la vida normal de leer y estudiar y otras laborucas que se presentan.
Samuel está limpiando de nuevo la casa con un grupo de voluntarios que han venido y que se dan buen arte en el trabajo. Los cristales han cambiado de color y ahora se ve el sol mucho más claro. Y es que el polvo de la carretera de al lado se nota cada día.
Comemos y echo un rato la siesta y cuando me levanto llega Joseph, que viene con otro salesiano que viene para los funerales del cura que murió el último día del año. Me sorprende la cantidad de actos que han organizado para los funerales del cura. Además de la misa antes del entierro que tendrá lugar  mañana, hoy hay tres misas por él a las ocho de la noche, a las doce de la noche y a las cuatro de la mañana…

Asisto a la misa de las ocho y hay mucha gente. Para las otras dejo el sitio a los que estén más en forma, pues creo que tengo que descansar para estar mañana en buena disposición.

miércoles, 13 de enero de 2016

13 de Enero de 2016

Martes

Me levanto con buen ánimo. Voy a abrir la iglesia y ya encuentro a gente que está dispuesta a rezar el rosario antes de la misa. No hay luz, pero pronto el generador está en marcha. La gente sigue viniendo numerosa y la sensación es agradable, aunque la procesión va por dentro, pues sigo sudando y cambiando camisetas. Por la mañana han sido seis.
Recibo a un señor de la India que me había hablado hace tiempo de plantar árboles. Hoy he tenido un encuentro con él durante tres cuartos de hora. Hemos hablado de la posibilidad de plantar árboles en el terreno que tenemos en Towama y también en las escuelas que tenemos en nuestra zona. Creo que es algo interesante y que empezaremos poco a poco, pues no quiero hacer las cosas sin control y como me parece algo muy positivo no quiero dar algún paso en falso. Veremos de presentar las cosas primero en la comunidad, luego a los interesados y a ver a donde llegamos. Plantar árboles frutales es la mejor inversión que cualquier propietario de tierra puede hacer, pues pide menos trabajo que otras actividades agrícolas y te da beneficios durante muchos años, es la experiencia que intento comunicar a los campesinos, pero que hace falta que la vean hecha realidad para que se decidan a ello. Ya lo he hecho anteriormente y sé que es efectivo, pero que lleva tiempo y hay que tener paciencia, pero podremos salir adelante con ello.
Sigo sudando, pero cuando hay algo que te puede ayudar a mejorar la vida de la gente, te olvidas de lo que te pasa y tiras adelante con lo que te llegue. También he ido con Samuel a visitar al cura al que hemos sustituido en la parroquia y hemos charlado un rato juntos. Estaba contento de nuestra visita y hemos podido concretar también algunos asuntos.
También nos hemos encontrado en el camino con la monja del centro de pastoral que había ido de vacaciones. Estamos contentos de verla y tendremos que ver qué hacemos con la cuestión del agua, pues es ella la que nos puede ayudar en este momento, ya que ellos tienen un pozo y nosotros tendremos que pensar en hacernos uno y mientras eso llega, quizás nos puedan ayudar a que tengamos agua corriente.
Samuel tiene reunión con los del movimiento misionero que van a ir a encontrar el Rector Mayor en Lungi y yo salgo un rato a comprar y al ciber. Hoy la conexión es mala y no hay forma, así que me voy a otro y las cosas son malas también, pero por lo menos logro enviar y recibir correo.

No hay luz y cenamos con la linterna. Por la noche viene y aprovecho para escribir de forma que mañana, cuando tenga tiempo, pueda enviar correos.

martes, 12 de enero de 2016

12 de Enero de 2016

Martes


Tengo delante el calendario de María Auxiliadora.  Voy poniendo en orden las cosas en la habitación y me voy aposentando en el nuevo orden. Me llevará tiempo acostumbrarme, pero es lo que toca.
La gente va viniendo a la misa un poco más numerosa, será porque vamos invitando, porque también el frío va disminuyendo, y la sensación es agradable el ver que la presencia aumenta a la vez que nos vamos conociendo y saludando con más familiaridad.
Joseph tiene que ir a preparar las cosas que tiene pendientes con la venida del Rector Mayor y va a pasar un par de días fuera, lo que quiere decir que estaré un poco disminuido, pero se acepta lo que nos llega. Espero que venga Samuel del funeral al que fue a Lungi, quien me llama y me dice que vendrá por la tarde. No estoy en muy buena forma pues la diarrea de ayer tiene sus consecuencias hoy, que se añade al polvo de los caminos y a un posible catarro, pero sigo con la actividad normal.
Ahora lavar la ropa es un trabajo extra. Antes meterla en la lavadora era una cosa normal, ahora, como no tenemos agua corriente, lo primero es ir a buscar el agua en la planta de abajo donde alguien la acerca desde el pozo; luego, traerla con cubos, tenerla en tu habitación, lavarte y ducharte con la calabaza y lavar la ropa a mano y en especial el tiempo que le lleva secar… Cuando de nuevo tengamos agua, que espero que no sea antes de un mes, por lo menos podremos disfrutar de lo que ahora padecemos…

Samuel llega por la tarde y me pilla en el momento que estoy en un ciber, pero vengo a casa para abrirle la puerta, pues se ha dejado las llaves. Nos encontramos y me dice que está cansado. Se ducha, duerme un rato y nos encontramos para cenar. Después rezamos un rato y sigo leyendo y organizando cosas en la habitación. Hay luz hasta media noche y, aunque logro dormir, sudo abundantemente. Me cambio la camiseta cuatro veces por la noche y ahora no es a causa del calor, sino del catarro que estoy pelando.

lunes, 11 de enero de 2016

11 de Enero de 2016

Lunes

No tenemos luz, pues se va con una cierta frecuencia, pero para la misa encienden el generador y las cosas marchan. Después de Misa Joseph recibe a parroquianos que le vienen a ver y luego desayunamos y tenemos una larga reunión de más de dos horas en la que vamos aclarando puntos en todos los aspectos de la parroquia, de la comunidad, de los pueblos, de los proyectos, de forma que Joseph esté al día y podamos dar pasos en la dirección adecuada.
Después voy a visitar una escuela, pero tengo mis problemas… Una inoportuna diarrea me hace salir apresuradamente del vehículo un par de veces… Como tenía un rollo de papel higiénico a mano, no hubo mayores problemas y por la tarde ya la cosa se calmó.

Joseph ha estado en un funeral multitudinario que le ha llevado hasta media tarde y cuando ha vuelto del cementerio se ha reunido con los responsables del consejo parroquial, mientras yo he seguido poniendo en orden mis cosas en la habitación, he lavado la ropa y me he ido a conectar a un ciber, pues no tenemos conexión en la casa y estamos a la espera de decidirnos por un sistema más barato que lo que había hasta ahora.

domingo, 10 de enero de 2016

10 de Enero 2016

Domingo

Me levanto temprano y salgo como cada domingo a los pueblos. En el primero les cuesta estar a la hora, pues hoy he ido a amanecer al pueblo… Y soy yo el que tiene reloj… Pero al fianl son muchos los que están presentes.
En el segundo pueblo seguimos con los problemas de número que no son muchos, pero contando lo que han llegado tarde, por lo menos han pasado de la cincuentena.
En el pueblo siguiente también hoy son menos numerosos qe la semana pasada, pero hay quienes han ido a otros sitios por asistir a celebraciones de difuntos de la familia, por lo menos eso es lo que me dicen. Yo sigo insistiendo en lo que les dije la semana pasada y alguno da testimonio de que rezar juntos marido y mujer, hace cambiar las cosas.
Por la tarde Samuel se va y yo acompaño a Joseph a una misa que celebra en una casa, antes del funeral que tendrá lugar mañana. Son las costumbres de aquí y trato de enterarme de lo que suelen hacer y saber el sentido de lo que hacen.


Año Nuevo..pueblos nuevos

AÑO NUEVO… Pueblos nuevos…
Hoy, primer día del año y viernes. Por la mañana he rezado en tres pueblos, como hago domingos y festivos; y como cada viernes, por la tarde he ido a ver los pueblos que regularmente visito. Cassama y Gbalehun. Pero se me ha ofrecido otra oportunidad y la he aprovechado. Hay un pueblo cercano a Cassama que tiene un camino regularcillo y me han dicho que han arreglado el puente que estaba en mal estado. Arreglar un puente aquí significa poner unos troncos de palmera cruzados y ya tenemos solución para bastante tiempo, pues la palmera no se pudre y las termitas no la atacan, mientras no venga un camión cargado que se lo cargue… El puente puede durar mucho tiempo.
Puente recién arreglado

El nuevo pueblo al que he ido, según reza el cartel se llama Ngelahun y está yendo a Cassama, en una desviación que hay tres kilómetros antes y el camino hasta el pueblo es de alrededor de dos kilómetros, con un puente que acaban de rehacer y un arroyo que atravesar, que ahora en periodo seco no ofrece ningún problema, lo mismo que un par de cuestas bastante pronunciadas que no me las imagino durante las lluvias…
Me acompañaba uno de ese pueblo que suele venir a rezar a Cassama con su familia y que hoy había venido solo, pues su esposa se había quedado en casa porque el hijo pequeño tenía fiebre.
El camino es dificultoso, especialmente si es la primera vez que lo recorres y no conoces lo que te puedes encontrar, pero lo hice sin mayor problema y al llegar al puente me paré para tomar algunas fotos, una foto habla mejor que mil palabras, para tener algo gráfico que se recuerda mucho mejor que haber visto la cosa al natural.
Para llegar al pueblo hay que pasar por una gran bajada hasta el arroyo y luego tiene otra buena pendiente al final de la cual se encuentra un pueblecito pequeño, con casas muy juntas y gente que no esperaba una visita así, pues era el primer vehículo del año, pero el último del año pasado bien me parece que hacía meses que había llegado.
En cuanto llegué, saludé a las personas que iban apareciendo y lo que me llamó la atención es que me conocían bastantes de ellos. Imagino que me habrán encontrado en el camino y, si van en la misma dirección, les suelo invitar a subir y ahorrarles la caminata.
Entrada al pueblo

Se organizaron y en un sitio que llaman iglesia, un espacio abierto, pero techado y cimentado y en el que hay algunos vestigios de que han enterrado antes, nos reunimos alrededor de  una docena entre niños y adultos. Como era el primero de año, les invité a rezar y luego les daría la bendición, algo que aprecian bastante.
El padrenuestro lo siguieron casi todos, el avemaría algunos menos y, cuando les di la bendición, algunos hicieron un garabato, pero al final todos contentos salieron en mi compañía y nos dirigimos hacia donde estaba el vehículo, pues para mí ya era hora de estar en el pueblo siguiente.
Se ofrecieron a acompañarme hasta el cruce, algo que suelen hacer los mende con los que los visitan, pero les dije que el vehículo sabía el camino por el que había venido y que yo no necesitaba que volvieran a hacer el camino solo por acompañarme.
Se quedaron tranquilos y yo emprendí mi camino de vuelta. Ahora me fijaba un poco más en los diferentes tramos del camino, lo mismo la bajada que la subida cerca del pueblo son sitios difíciles para la época de lluvias, pero ahora se pasa sin mucha dificultad.
Tengo un nuevo sitio que puedo visitar y unos cuantos cristianos que me han dicho que me esperan… Creo que es la realidad que va a ir surgiendo poco a poco, pues cuando te ven regularmente y saben que estás con ellos, se  entregan y son asiduos para rezar.
La Capilla

En Gbalhun hay un buen número de gente y, a pesar de que han rezado por la mañana, vuelven de nuevo por la tarde y por eso intento ser corto y darles la bendición, cosa que aprecian y  les invito a ser los portavoces de Dios en sus casas llevando la bendición a todos y especialmente si hay enfermos o mayores.
Al acabar la oración identifico a Mohamed, el musulmán hermano pequeño de un cura diocesano que la semana pasada decidió venir a rezar con nosotros. Le saludo, le invito a entrar en el vehículo y me dispongo a llevarle a su pueblo, y una nube de críos se monta, pues también ellos han venido del mismo pueblo. Hoy simplemente les he dejado en la entrada del pueblo, pues la oración ya la hemos hecho en la iglesia.
Esto me ha permitido estar en un pueblo más y creo que hoy es el séptimo que visito. No está mal para el comienzo del año, y las perspectivas parecen favorables. Esperemos que al final las cosas evolucionen y podamos llegar a tener comunidades cristianas en tantos pueblos donde la tradición o las sectas son los que están presentes.
Que Jesús y María cuyas fiestas celebramos hoy, ayuden a que este deseo de estar con la gente en los pueblos llegue a ser una realidad duradera y un testimonio para los otros.

Antonio.

sábado, 9 de enero de 2016

9 de Enero de 2016

Sábado

Decimos la misa Joseph y yo, pues en la sacristía no hay más albas. Hay un buen número de gente y participa y, aunque hay los que llegan tarde, la cosa va aumentando.
Después del desayuno tenemos una reunión con Uba en la que aclaramos muchos puntos en diversos temas, de forma que quedamos constituidos como comunidad que jurídicamente depende de  la de la capital, pero en realidad tiene su autonomía.
Cuando acaba la reunión Uba sale hacia la capital y nosotros después de comer nos dedicamos cada uno a nuestra obligación. Samuel tiene reunión con el movimiento misionero, pues se preparan para asistir al encuentro con el Rector Mayor que tendrá lugar a finales de mes en Lungi, Joseph tiene su cometido en la iglesia y yo voy a la reunión de parejas de cada sábado y hoy, después de mucho insistir y recordar, me encuentro al catequista de Tikonko que me espera al lado del camino y, junto con su mujer, van a asistir a la reunión. Me alegro de ello y les veo decididos en el paso que han dado. Esperemos que otros vengan.
Después de cenar estoy hablando un rato con Joseph. Me pide un tiempo para reunirnos, cosa que tendrá lugar el lunes, pues el domingo los dos estamos suficientemente ocupados.

Samuel va a viajar para asistir al funeral de una señora que es como si fuera la madre de un salesiano, estudiante de filosofía, y que el entierro será el Lungi.

viernes, 8 de enero de 2016

8 de Enero de 2016

Viernes

No había luz al levantarnos y en la iglesia han encendido el generador. Al principio no había mucha gente, pero con los que llegaron más tarde pasan de la cincuentena. Después del desayuno salgo a reunirme con los padres de alumnos de la escuela de Balei y al mismo tiempo marcamos el sitio en que se ubicará el pozo para la escuela. Uno de los maestros me presenta una lista de gente para empezar el trabajo en el pozo. Hoy están limpiando la zona de maleza y preparando las cosas para poder comenzar el trabajo.
En la reunión los presentes están contentos y entusiasmados, pero la presencia de alumnos sigue siendo poco numerosa. Una señora promete que desde el lunes los alumnos estarán en clase. Le digo que si el lunes puedo venir y no veo los alumnos en clase que iremos por el pueblo juntos buscando a los ausentes. Les hace gracia la ocurrencia, pero si el momento llega, seré capaz de hacerlo.
Hay gente que aprovecha el viaje para desplazarse y otros que viajan para sus asuntos. Uno del pueblo me ha hablado de vernos con el señor que marcó el terreno de la escuela para ver cómo andan los trámites de los papeles. Nos pasamos un buen rato en el intento, pero al final tenemos que volver otro día.
Cuando llego a casa para la comida Uba y Joseph ya han legado. Comemos en amigable charla y después vamos a echar la siesta un rato, mientras Samuel sigue con los ayudantes el plan de limpieza de la casa, la planta baja, y lo están haciendo a conciencia.
Voy a Cassama donde encuentro poca gente, pero por lo menos ha habido gente en el camino a los que he transportado. Si no haces lo más, por lo menos, hacer lo menos.
En Gbalehun hay buen número de gente pero no tantos como la semana pasada. Con ellos cantamos un rato y recuerdo o que les había pedido de rezar en casa con los padres. Algunos lo han hecho y nos dicen que la experiencia es positiva, pues no ha habido discusiones. Animo a los que aún no lo han hecho a que lo hagan esta semana.
También vuelvo cargado de gente que se prepara para el comienzo de las clases. Y el camino es polvoriento, pero la máquina niveladora ha empezado a repararlo, con lo que nos queda el consuelo de que en unos días podamos tener menos baches de los que teníamos hasta ahora.

En casa ya han cenado y Uba se ha ido a acostar. Los demás están en conversación en el comedor y seguimos hablando mientras ceno. Hay luz y aprovecho para cargar el ordenador porque hoy he enseñado fotos en los pueblos, cosa que a la gente les encanta.

jueves, 7 de enero de 2016

7 de Enero de 2016

Jueves

Después de la misa y del desayuno Samuel sigue en su tarea de acarreo de cosas, hoy en particular las de párroco que se retira, a quien le cuesta dejar la casa, pero lo lleva muy elegantemente. Es una muy buena persona.
Aún por la tarde sigue el trabajo y al final del día lo podemos dar por concluido. Atrás queda todo un esfuerzo de cambiar cosas y por delante el reto de ponerlas en su sitio y sobre todo de limpiar los locales, algo que es de mucha necesidad. Por una parte el harmatán trae polvo, pero sobre todo el estar la casa cerca de un camino que no está asfaltado y que es frecuentado por toda suerte de vehículos añade mucho más que cualquier otra causa.
Voy a los pueblos, como de costumbre y visito a las viudas de los que han fallecido y a la vuelta el coci no está en forma y nos vamos a cenar a un chiringuito porque no ha preparado nada. Hablo un rato con el coci y veo que tiene malaria, pero tiene también un cierto pesar porque en el cambio de casa ha salido perdiendo, ya que no dispone de la muy buena habitación que tenía en la otra, pero lo mismo nos pasa a los demás, no tenemos agua corriente y hemos vuelto al sistema de lavarse con un cubo y una calabaza y para la ropa estamos en las mismas, no tenemos agua y no hay lavadora, así que paciencia y a ver cuando tenemos agua y el resto de las cosas.
Me ha llamado Andreas y me manda los papeles del conteiner, pero como no tenemos conexión a internet porque estamos en la nueva casa, voy a un ciber y trato de enviar lo que se necesita a unos y otros. Me lleva tiempo y va despacio, pero al final la cosa llega.

Joseph ha anunciado que llega mañana con Uba y estamos contentos del anuncio para ver si ya podemos comenzar a tener vida en común los componentes del equipo. Que Don Bosco nos ayude.

miércoles, 6 de enero de 2016

6 de Enero de 2016

Miércoles

Aquí ni siquiera se habla de Los Reyes; ha sido un día ordinario, con misa por la mañana que ha sido pasada un poco por agua. También por la noche ha llovido y el ambiente es fresco y nublado, pero al final acaba saliendo el sol.
Vamos a ver la escuela de Balei, donde hay muy pocos alumnos. Pasa lo mismo en las otras que hay pocos o todavía no han empezado. Nos encontramos con el presidente de los padres de alumnos y le decimos que queremos ver a los críos en la escuela, cosa que nos promete hacer… Y, dato interesante, cuando volvemos, una señora con tres críos nos pide que la traigamos a Bo. Resulta que es la mujer de uno de los maestros de Balei… Si la mujer de un maestro no envía los críos a la escuela… Que harán los demás…
De vuelta a casa seguimos con los traslados y el carpintero viene a cambiar cerraduras en las puertas. La comida es a la carrera y seguimos en el trasvase y por la tarde vamos a Towama a visitar a la pareja que planea hacer el casamiento para pascua. Rezamos y damos una vuelta por el pueblo. Hay animación, pero los estudiantes todavía están de vacaciones.

Seguimos llevando cosas de una casa a otra y esperemos que mañana ya demos la función por concluida.

martes, 5 de enero de 2016

5 de Enero de 2016

Martes

Digo la misa en la parroquia. El harmatán sigue, pero hoy hay muchas nubes y al final acaban cayendo unas gotas que lavan un poco el ambiente y las hojas de los árboles y la sensación es de un cierto frescor, que la gente llama frío.
Llevo unas cuantas cosas a la nueva residencia, dejo vacía la habitación para que el que venga tenga espacio para poner sus cosas y me encuentro con la habitación que voy a ocupar bastante sucia. Con paciencia me dedico a barrer y fregar. Al final se nota la acción… Y es que como la casa está cerca de la carretera y hay bastante tráfico y no hay asfalto, el polvo acaba llegando por todos los sitios. A ello habrá que irse acostumbrando.
También hemos estado todo el día sin luz y por suerte al final, por la tarde, cuando estábamos rezando el rosario, la luz vino y también había conexión, lo que nos ha permitido enviar y recibir correos y leer las noticias.


lunes, 4 de enero de 2016

4 de Enero de 2016

Lunes

Digo la misa en la parroquia y después me paso la mañana preparando cosas para llevar de una casa a la otra. Estamos haciendo el cambio y siempre hay algo que organizar. También tengo tiempo para leer y estudiar un rato y conversar con los que vienen a visitarnos.
Por la tarde Samuel anuncia que vendrá, y al final lo hace por la noche y con problemas de carburante, cosa que suele pasar en estas fechas, que las gasolineras no tienen suministro y suele haber colas inmensas.

Samuel llega cansado del viaje. Cenamos, rezamos y nos vamos a descansar. Hemos estado todo el día sin luz, algo que no pasaba hace mucho tiempo, pero a todo hay que acostumbrarse. Por suerte la luz viene por la noche y puedo llenar el depósito del agua y enviar los correos que tenía pendientes.

domingo, 3 de enero de 2016

3 de Enero de 2016

Domingo

Como cada domingo salgo temprano y voy a amanecer a Nagoyon. Y como pasa otras veces, a la gente le cuesta venir a la hora, pues el fresco hace que se duerma más, pero al final están más o menos los mismos que otras veces y el ambiente es bueno y de fiesta.
Al final de la misa me encuentro el vehículo invadido por bultos y gente que sin decirme nada se han instalado dentro y cuentan con que les traslade a la ciudad. Me armo de paciencia y acepto lo que hacen, pero creo que tendré que hablar la próxima semana para evitar que se lo tomen como algo normal.
En Tikonko al principio me encuentro con una persona que espera, pero luego van llegando los siguientes, aunque no son muy numerosos, cosa que les recuerda el catequista en los anuncios y les anima a venir.
Cuando llegué y vi que no había gente, aproveché y me fui a dar una vuelta por el nuevo camino que han intentado hacer de acceso a la iglesia desde la casa del jefe, pero me he dado cuenta que a pie se puede hacer, pero en vehículo ni se puede soñar en pasar incluso en la estación seca, así que tendremos que seguir haciendo el rodeo que hacemos hasta el presente.
En Towama hay una misa aniversario de un difunto que fue profe en la uni y que ayudó mucho a la comunidad. La iglesia está casi llena al principio y con los que llegan para el aniversario del finado se acaba llenando a rebosar. Son las cosas, cuando hay una ceremonia por un difunto, la gente se vuelca en ello y no escatima nada, pero para otras cosas no son así y a todo nos tenemos que acostumbrar.
Después de misa me piden ir a rezar ante la tumba del difunto, cosa que hago con agrado, pues es también un buen momento para conocer a la familia y ver  qué hacen y cómo organizan las cosas. La familia que se ha presentado, unos viven en Freetown y otros en Londres. No sé si hay algunos más en otros sitios, pues no he tenido tiempo para mucho, ya que he bendecido la tumba y después la comida y luego me he vuelto rápido al coche en el que la gente me espera para que les traiga a Bo.
Cuando llego a casa son casi las dos y Joseph se prepara para emprender viaje a Lungi donde tiene asuntos pendientes que intentará resolver durante la semana. Yo me echo un rato la siesta y salgo hacia un pueblo, y en la puerta me encuentro con un cura que ha venido a visitar a los vecinos y le llevo al sitio donde va. Me doy cuenta de que el vehículo no tiene carburante y me tengo que apañar, pues estamos en momentos en los que es difícil encontrarlo en las gasolineras y recorro varias antes de que me sirvan.
Con el catequista de Mattru me voy al pueblo, tenemos cita a las cinco y, un rato más tarde aparecen los primeros, y después otros más van llegando. En este pueblo hace tiempo que no les he dicho la misa, pues me piden que sea el domingo a las ocho de la mañana. Trato de explicarles que estoy solo como cura donde el año pasado había dos y que ahora tengo compromisos en otros pueblos a las siete, a las nueve y a las once y que a ellos, si les puedo servir, es a partir de la una, cosa que no les agrada demasiado, pero se lo hago ver claro, que no me puedo dividir y no pienso en dejar a otros para encargarme de ellos, pues tampoco tengo una respuesta clara por su parte ni compromiso de que la vayan a dar. Al final les doy un tiempo para reflexionar y que me presenten propuestas y a ver a qué solución llegamos.
Cuando vengo a casa son más de las ocho y hay luz y conexión. Leo las noticias y los correos mientras ceno y después rezo y escribo la crónica y en un momento hablo con Jose Mari de Pamplona y me dice que aún no tienen los papeles, pero que pronto vendrán.
El día ha sido largo e intenso, mañana y tarde en los pueblos. Estoy cansado del tiempo pasado fuera, y contento de lo que he vivido, y le pido a Dios que me ayude a ser, como les decía esta mañana en la homilía, si no se puede ser el sol del día ni la luna de noche, por lo menos ser la vela que ayuda a alguien a ver en la oscuridad y le muestra el camino.


Un Contenedor para Sierra Leona II

Video de Un Contenedor para Sierra Leona (PINCHA AQUI)









sábado, 2 de enero de 2016

2 de Enero de 2016

Sábado

En la misa que preside Joseph, no hay mucha gente al principio, pero al final más o menos el número es el de otros días. Joseph les anima a venir y a traer a otros con ellos a la misa, idea que ya les había propuesto yo también antes. Quizás un día cuando no lo esperemos se producirá la reacción y serán numerosos para la misa.
Después de desayunar hablamos un rato cambiando impresiones hasta que Joseph se tiene que ir porque tiene una reunión y yo llevo cosas en el vehículo a la otra casa. También traigo al soldador que va a cambiar una cerradura a una puerta y le vuelvo a llevar a su taller. Esto me lo ha pedido el cura que vive ahora en la casa al lado de donde vivimos nosotros. Le digo que me gusta el que hagamos estas cosas, necesitarnos unos y otros, que así nos ayuda a estar más cercanos. Me ha dado una buena impresión el soldador y creo que el trabajo que ha hecho es bueno.
Joseph se ha ido a la parroquia porque hay una boda y yo espero largo rato que se me hace más corto porque el fontanero y el carpintero vienen a acabar lo que han comenzado, pero no lo logran así que habrá que volver de nuevo.
Me voy a los pueblos a la reunión de las parejas y hoy han respondido a la invitación que les hice el otro día: hay dos parejas que están dispuestas y una tercera que aún no logra la vida sin pelearse y que tendrá que tomar las cosas con calma. Es un momento doloroso, pues después de haber caminado juntos largo tiempo, estos momentos fallidos te hacen mal, pero hay que aceptar la realidad que se impone.

En casa cenamos, rezamos y, cuando acaban las noticias me pongo a hacer la crónica. Es mejor no dejar tiempo que se acumulen las cosas y que luego olvide de contar algo importante.