El viaje de ayer tiene sus efectos de cansancio. Por la
mañana hemos estado en casa hasta que vino Paul, salesiano que está en Lungi y
que ahora, cono hay vacaciones viene a ver a su familia unos días.
Estamos sin cocinero, pues ha ido a Liberia a hacer un
servicio y nos las apañamos como buenamente podemos, Las latas que llegaron en
el contenedor siguen sirviendo para mucho en estos momentos.
Por la tarde, después de una mañana
lluviosa, vamos a Nagoyon para el catecismo. No hay muchos adultos, pero sí un
buen número de críos y Samuel trata de recordar lo que les enseó la semana
pasada, que algunos recuerdan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario