Hemos tenido luz toda la noche, algo
que hacía tiempo que… Y levantarse es una fiesta con luz… Hasta me afeito con
cierto esmero frente al espejo…
Voy a Towama a decir la misa. Aunque
llego con tiempo, el cielo está lo suficiente encapotado como para no poder ver
las estrellas. En la homilía les hago el comentario de Emaús y cómo
Lucas hace catecismo y nos ayuda a comprender la Escritura.
Visito a los maestros en clase,
luego voy a ver si hay motosierras en alguna tienda. Encuentro una y hago
gestiones para que me digan la calidad. Los que vienen, el operador del aparato
en particular, me dice que es muy endeble, pero me lleva a otros dos sitios en
los que también hay estas máquinas y en uno nos prometen tener mañana lo que
pedimos, así que a esperar a mañana a ver si es verdad.
Voy a ver a los que conducen el
camión de la arena, y han subido el precio de forma que lo tenemos que dejar.
En casa vemos otras posibilidades. También he visitado la otra parroquia
buscando los dosieres que dejé de los que habían recibido sacramentos y aún no
los han encontrado. Luego organizamos las cosas para ver si mañana podemos
obtener todo lo que necesitamos y comenzar el trabajo con la madera.
Después de comer y un rato de
siesta, planeo lo de comprar libros, pero sin prisa, pues el cura que me los
ofrece estará disponible la semana que viene. Tengo bastante tiempo para leer,
pues no me vienen a buscar para ir a los pueblos.
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