9 de Abril de 2016

Sábado Es sábado y se percibe en el ambiente. Habrá boda en la iglesia y después de la misa de la mañana las cosas se preparan y se adorna debidamente. Han venido a verme para que haga un bautizo… No me gustan las cosas sin preparar, pero se trata de una pareja que vive en América y que han venido porque él es de aquí y sus padres pertenecen a esta parroquia. Por lo que trato de establecer contacto con los interesados, hacer de la reunión un momento de encuentro y de catecismo para toda la familia y el bautizo algo cercano y familiar. Creo que se han ido contentos del resultado. Samuel se va a acompañar a un cura salesiano que estuvo en Lungi y que celebra su aniversario y él le conoce. También vuelve Edison de su encuentro en Makeni y yo voy a los pueblos, empezando por Balei donde estamos con los trabajos del pozo, que han acabado de cavar y ahora hay que cimentar. Las cosas van más lentas de lo que pensé, pero van avanzando, y estoy contento de cómo funcionan. Las parejas hoy están a medias, pues también trabajan como voluntarios en el pozo y no se puede estar en dos sitios a un tiempo, pero los que vienen están interesados y hay dos parejas nuevas, lo que te da ánimos para seguir en el trabajo. En Tikonko las cosas son un poco diferentes. Del número que estaban en la lista que me dieron, aparecen hoy para hacer el catecismo la cuarta parte y no me da que vayan a venir muchos más; pero la esperanza es lo último en perder y por ahora sigo pensando que tenemos una comunidad importante en Tikonko, pero que hay que acompañarla y formarla. Y para eso estoy disponible y encantado. Edison me esperaba a la vuelta, rezamos, cenamos y nos distraemos un rato hablando juntos. Después preparamos las cosas para el día siguiente y más tarde nos vamos a dormir.