Voy a rezar con la gente de Mattru. Antes de las seis han comenzado y hay
más de una veintena de adultos rezando. Hoy he contado de nuevo los que venían
hacia Bo trayendo sus cargas de leña o carbón y casi llegaban a ciento
cincuenta…
Pienso que la cosa requiere un tiempo de meditación y estar muy atento a
lo que esperan y ofrecen, pero
buscar algo para ellos como solución, es importante y habrá que tenerlo en
cuenta.
Hoy
viene el profesor de lengua, pues ayer no pudo venir y hoy se va a ir en moto
hasta su pueblo. Así adelantamos sesión y los dos nos sentimos contentos con
recuperar algunas horas de clase.
En
Mattru la gente que debe venir, no viene a la reunión, pero me voy a buscarles a
sus casas, cosa que les llama mucho la atención y a lo que no están
acostumbrados, pero los que me acompañan hacen ambiente y en cada sitio rezamos
y todos contentos.
Samuel ha estado con los monaguillos y también sienten el olvido que han
tenido, pues varias semanas nadie ha aparecido para estar con ellos.
Seguimos con los problemas de la luz y encendemos el generador en el
momento que es necesario, lo que nos permite el trabajo en el ordenador y el
contacto con las noticias.
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