Y nos plantamos en el último día del mes. Voy con Samuel a rezar a Mattru y les llevamos unos rosarios que nos habían pedido. Están muy contentos y nosotros compartimos el momento de la oración de la mañana con ellos. Son una veintena. Aún es de noche y va amaneciendo mientras rezamos juntos el rosario.
Tanto a la ida como a la vuelta, contamos la gente que se desplaza hacia Bo llevando leña o carbón o palos que se usan para la construcción de edificios. Hay más de cien personas en la ida y en la vuelta, lo que nos hace ver la forma de vivir de esta gente, unas monedas y a ver lo que va saliendo. También aquí habrá que pensar en cómo hacer con una situación que no es nada interesante ni prometedora.
Volvemos a casa y celebramos la misa. Último día del mes nos acordamos de D Bosco y le pedimos que nos ayude en nuestra vida de cada día.
Hay un grupo de jóvenes que vienen a ayudar en el trabajo de preparación del arroz, pero no vienen con mucha prisa. Antonio va a ver las labores del pozo y ya se encuentran a siete metros de profundidad, Hasta ahora no hay dificultades y el ritmo se va acompasando. Esperemos que para el fin de semana nos encontremos con el agua que buscamos.
Para el almuerzo estamos una decena de personas, pues los jóvenes que esperábamos para el trabajo del arroz finalmente han llegado.
Como llevamos mucho tiempo sin luz, encendemos un rato el generador, cosa que aprovecho para ver las noticias y también he podido hablar un rato en el skype con Loli, algo que hacía tiempo que no conseguía.
Por la noche nos llama Uba y nos dice que llegará con Alberto, un español que viene enviado por la procura de Madrid, pero que se irán al día siguiente, pues tiene el avión que le espera.
Yo nos despedimos del mes en plena semana santa y a la espera de un abril floreciente y renovado que nos dé la nueva vida de la Pascua.
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