He dormido bastante bien y sin sudar. La ducha está
fresca y además tenemos luz, que no es cosa de todos los días. Hoy vamos un
rato antes a la iglesia pues seguimos con la liturgia de las horas para los que
vienen a rezar y es costoso, pero en ello estamos. Después del desayuno Ana
intenta preparar un plato de lentejas con la cocinera y a continuación nos
vamos a dar una vuelta por el mercado, donde nos pasamos un rato agradable
comprando paños y otros recuerdos para la gente de la familia y luego
recorremos una parte de la ciudad para ver y conocer el sitio donde
estamos.
Venimos a casa un rato antes de comer y les paso unas
fotos que tengo en el ordenador y que les muestran el trabajo de
desarrollo que hacemos. Creo que esto les ayuda a comprender lo que hacemos y
cómo lo hacemos.
Después de la comida y la siesta estamos un poco
hablando abajo y luego suben a forrar unos libros de oraciones que utilizamos
en la iglesia.
Vienen los maestros que han acabado las clases y me
dicen que prefieren que les lleve mañana cuando voy a lo de las parejas. Nos
encontramos un rato y les hablo de compostaje y quedamos en que organizaremos
una sesión para los que estén interesados en el tema. También les paso
diapositivas para que vean en imágenes el trabajo en los sitios donde he estado
antes y les animo a ellos a seguir en su trabajo.
A las cinco hay un retiro para los que van a
participar en la fiesta de las familias el domingo en Madonna y está bien
hecho, desde la charla que la da un laico hasta las confesiones y la exposición
del Santísimo. Hay muchas más mujeres que hombres y la asistencia es regular.
Las confesiones siguen su curso y se pide estar a la altura.
Cenamos y hay un poco de conexión a internet, con lo
que leo los periódicos y me entero de la ola de frio que se avecina en España.
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