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domingo, 24 de marzo de 2019

24 de Marzo de 2019

Domingo

24 de marzo, conmemoración de maría Auxiliadora. 

Nos levantamos sin luz y pronto, que nos esperan los pueblos. Cuando llamo a Luis, me dice que no está en forma y que prefiere quedarse por lo que me encamino hacia la finca donde paso y saludo al guardián y alguno más que está por allí. 

Voy a Balei a buscar al maestro enfermo y venimos a Nagoyon donde los tempraneros están rezando del rosario y poco a poco los demás van llegando hasta formar un grupo no muy numeroso, pero consistente. 

En la homilía les hablo del camino que la samaritana hace para encontrarse con Jesús y me refiero al camino que cada una de las parejas está haciendo y que se refleja en la experiencia personal de cada pareja. Hay muchas cosas que quedan por hacer. Pero se va hacia adelante con paso firme. 

Vuelvo al maestro a su pueblo y llego a Tikonko donde también hay un grupito, aquí más reducido, rezando el rosario. Otros van llegando, pero no muchos y repetimos la insistencia en el encuentro personal y repetido con Jesús en la oración y en la vida de los demás. 

Paso de nuevo por la finca donde están trabajando en el pozo. Han tenido problemas con el primer emplazamiento y han comenzado en otro sitio… y luego voy a Towama donde también están rezando el rosario y les felicito. Hay un buen número y no muchos llegan tarde, cosa que hago remarcar también. Volvemos a las mismas ideas insistiendo en los que vienen a misa y no comulgan y les invito a leer la palabra de Dios, en particular en el libro resumen que acabo de recibir y les prometo llevarlo a los que quieran para el miércoles cuando vayamos a misa por la mañana. 

Las ofrendas se van haciendo corrientes y la colecta ha subido un poco en los tres pueblos, reacción positiva. 

Después de misa me llevan a un terreno donde les marco un pozo, con el problema de que está demasiado cerca de la vía pública y tendrán problemas si cavan, pero es el único sitio en el que me da que hay agua… 

En casa, Luis está enfermo y vamos con él al hospital, donde el médico le da sales de rehidratación oral y le recomienda dieta y reposo, cosa que hacemos los dos durante la tarde, pues yo también estoy cansado a cuenta de no dormir por el calor. 

A la sombra del ventilador, el calor se puede soportar, pero si se va la luz… 

El recuerdo de María tanto en las misas como en las oraciones nos acompaña durante el día y nos bendice la jornada.

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