Amanece como un día más, sin luz, y voy a rezar a Tikonko donde hay un grupito de hombres y luego llegan algunos más. Además de hablarles del tema del ayuno, les digo también lo del trabajo en la finca, cosa que creo que aprueban y piden los planos , cosa que les prometo encontrar.
Vengo a casa y desayuno con los que van a salir de viaje. Creo que ha sido una estancia agradable para ellos, lo mismo que para nosotros, en particular para Luis que se ha conocido con ellos y han hecho buenas migas.
Luis se va a trabajar en la finca y yo me quedo para hacer algunas diligencias, mientras me doy cuenta que hoy se había anunciado huelga y hay bastantes sitios cerrados. Me doy una vuelta buscando un aplique para el ordenador y no hay manera, ni las puntas ni el voltaje coinciden .
Estamos en casa a la hora de comer y tenemos una frugal comida en el primer viernes de cuaresma. Me echo una buena siesta que me ayuda a recuperar el que no dormí bien durante la noche y el cansancio del calor que se hace sentir
Voy a Towama para el viacrucis y después a Tikonko donde Juan nos acompaña y Luis le sigue para ver lo que hacen las abejas que ha intentado enviar a una colmena. En Towama la gente llegó demasiado tarde y me fui a Tikonko, donde estuve la mayor parte del tiempo esperando y después en la reunión motivando a los presentes para prepararse para recibir sacramentos.
Cena, reposo, cama hacen que el día me haya resultado grato y lleno de actividades.
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