Es jueves y hay oración por la mañana, y como de costumbre no hay luz hasta que no se enciende el generador. Hay un grupito de personas para la oración y luego sigue un muy reducido número para la adoración y, como me voy con los que me visitan, no puedo decir lo que pasa por la mañana.
Después del desayuno salimos a ver la finca, donde están trabajando y vemos los dos pozos que han comenzado, además del riego de las plantas de moringa y el trabajo de los albañiles en las columnas del depósito de agua.
Vamos a Balei y saludamos a los maestros y alumnos en la escuela a la vez que vemos el lamentable estado en el que se encuentra el edificio que pide uno nuevo. Después venimos a Nagoyon donde nos paramos en la construcción de la iglesia que Coco pondera muy vivamente, diciendo que es espaciosa, luminosa y bien ventilada. Volvemos a casa para la comida y después de la siesta me voy a rezar de nuevo a la iglesia mientras Luis va a buscar un enjambre y Coco y Bárbara descansan y preparan el viaje para mañana.
A la hora de la misa va habiendo un poco más de ambiente y grupo entre los jóvenes y estamos sin luz, algo que comienza a ser corriente con la sequía.
La cena, un rato de sobremesa y las noticias concluyen el día.
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