He ido pronto a decir la misa a Nagoyon, pero antes llevé víveres a la escuela de Balei porque van a celebrar una comida el viernes que acaban las clases. He utilizado lo que me quedaba de contendor con algunas cosas más que he añadido.
Acabada la misa he tenido reunión con los maestros de la escuela y hemos hablado del trabajo que harán en vacaciones. Hay bastantes preguntas y colijo el gran interés que tienen en ello. La realidad es que no les puedo dar nuevas noticias, pues no he tenido ocasión de encontrarme con los responsables del colegio.
Vuelta a casa con la furgoneta llena de pasajeros y carga, bastantes críos que vienen al colegio y a quienes recojo en el camino y otros que traen sacos de tapioca para vender en el mercado y así sacar algo para los gastos de cada día.
Christian se ha ido a un encuentro a Lungi y nos quedamos Segej y yo, y no nos vemos mucho, pues cada uno anda por su sitio. Por lo menos a la hora de comer estuvimos un rato hablando sin prisa. Me dice que ha ido al banco y que había tanta gente que ha desistido y volverá mañana. Le deseo cuerte, pues el banco suele estar atascado siempre.
Por la tarde voy al colegio y logro encontrarme con el director. Le pago las inscripciones y le hago ver lo que han subido el precio de las tasas. Cuando venimos a los números me promete hacer algo, pero no puede decidir él sólo… El problema es que han subido el preico de las matrículas bastante ás de el doble.
Por la tarde estoy solo, pues Sergej ha ido a casa de un salesiano que está de vacaciones y que ha perdido a un primo en un accidente de moto.
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