Vistas de página en total

domingo, 6 de marzo de 2016

6 de marzo de 2016

Domingo

Para empezar el coche no ha querido arrancar… Es algo que le ha pasado varias veces y es simple, pero necesita la mano del mecánico… Me voy a los pueblos en un taxi-moto, pues llamar a quien te lo arregle te hace llegar tarde. Tengo la suerte de encontrar una que me lleva y me trae sin problemas, que ya es mucho. Su principal preocupación es pasar el control de la poli, pues no tiene los papeles en regla, pero le tranquilizo porque si me lleva a mí, los polis no le van a pedir los papeles… Y  no es que no me controlen, es que les he llevado tantas veces en mi coche, que el día que me ven en una moto me dejan pasar sin más porque saben que el coche ha tenido problemas.
Pasar el control de la poli fue una verdadera aventura, pues llegamos y la cuerda estaba puesta, pero, por supuesto antes de las seis de la mañana no había nadie para bajarla… Fui al garito que tienen y llamé varias veces… No hubo respuesta. Quien estaba dentro dormía profundamente… Finalmente apareció una señora que vive allí cerca y, como me conoce, me bajó la cuerda y me dijo que pasara… Y a la vuelta, nadie nos puso ninguna dificultad. Un saludo amable nos permitió pasar sin más protocolos.
Los que vienen a misa se extrañan de no verme en el vehículo, pero les hago ver que también las averías pueden llegar al coche del cura. La misa en Nagoyon está concurrida y el ambiente es bueno. No hay comuniones y explico que dentro de unas semanas esperemos que las haya y que comencemos a crear una comunidad cristiana con adultos que comulgan y que serán los padrinos de los que quieran bautizarse siguiendo el camino de Jesús. Es la catequesis que tienes que ir haciendo donde no se ha hecho antes y que dará sus frutos más adelante.
En Tikonko hay algo más de gente y algunos venidos de paso. Fijamos el momento de la catequesis para los que quieren recibir el bautismo y con quienes me he comprometido y, a partir del sábado estaremos en la iglesia con ellos para comenzar el camino hacia el bautismo. Será un trabajo de encontrar los padrinos, de buscar a los que no vienen, de crear comunidad donde parece que antes la hubo y ahora no aparecen los que antes venían… Un reto que espero que junto a ellos podamos afrontar y que nos hará fuertes en la fe en Jesús.
En Towama las cosas para la celebración de la eucaristía no están preparadas y después de la misa tengo un encuentro con los líderes de los diversos grupos. Pienso que el problema no es la mala voluntad, sino el abandono que durante mucho tiempo han tenido. Una comunidad en la que no se hace catecismo no puede ser una comunidad viviente y algo de eso es lo que les pasa aquí, son cristianos de domingo y luego no da para mucho más. Así que con paciencia habrá también que estar con ellos y ayudarles a comprender que es la forma de cambiar.
 Se muestran muy sorprendidos cuando el presidente les dice que durante más de seis meses he estado con él y su esposa cada miércoles preparándoles para celebrar el matrimonio en la iglesia, algo que van a hacer en pascua y que intento hacerles ver que quiero que sea un modelo, pues aquí la gente no se casa porque es muy caro casarse… Y es la realidad, pero me las arreglaré para que no haya gastos, empezando por hacer la ceremonia sencilla y después no se irá a comer a casa de los que se casan, sino que las mujeres que vienen a misa se encargarán de preparar la comida que yo les llevaré, pues para algo he recibido la comida del contendor, y todos tendremos lo que haya que compartir en el patio de la iglesia.
Soñar es posible y hacerlo realidad un reto, que espero se repita, pues ya lo he hecho en otros sitios antes de aquí.
En casa las misas han sido como siempre y las reuniones de diversos grupos también han estado presentes. Después de comer me echo un rato la siesta, pues la mañana ha sido larga y Joseph se va a la capital a una reunión y esperemos que mañana venga con Clara, una española, arquitecto,  que trabaja en Sierra Leona y con la que hemos contactado para que nos ayude en los trabajos que queremos hacer en casa.

No hay conexión. Me paso la tarde escribiendo, lavando ropa y organizando cosas de la habitación. Por la noche la conexión llega y puedo recibir correos y noticias de unos y de otros. Y la luz nos acompaña durante la tarde y la noche, cosa inusual, pero estamos contentos con ella.

No hay comentarios:

Publicar un comentario