Nos
levantamos con luz y hoy nos acompaña todo el tiempo de la oración, cosa que no
hacen los fieles, que llegan en escaso número, si bien a la hora de la misa se
compensa con los aspirantes de los “Christian Brothers” que animan la misa con
un coro por lo que les felicito. Celebramos la misa de la pasión por ser
viernes recordando lo que Jesús sufrió por nosotros y les invito a vivirlo
durante la jornada.
Los
otros han ido a los pueblos para la misa y nos encontramos a la salida de la
iglesia cuando regresan. Trato de desayunar rápido para ir con el vehículo a
ver la situación en la finca y decidir de plantar mañana los anacardos, pues
luego Chris, que va a decir la misa a los críos de la escuela de al lado, va a
ir a buscar a Joseph que llega de sus vacaciones.
Me
voy a dar una vuelta por el mercado y a buscar un paño en particular y tengo la
suerte de encontrarlo a la primera de cambio. Se lo traigo al catequista que es
sastre para que me cosa una camisa para hacer un regalo.
Isaac
ha ido a la biblioteca de la universidad a buscar materiales para le trabajo
que está haciendo y la lluvia ha venido varias veces por lo que vuelve con
cierto retraso. En la comida hemos estado Larry y yo y nos han preparado
lentejas, cosa que Larry dice que le encantan y nos hemos animado mutuamente a
comerlas.
Después
de la siesta tan pronto hace sol como llueve con fuerza. Mejor estar en casa
que pillar una mojadura en cualquier sitio. Leo, rezo, luego comento con Larry
la situación y más tarde llega Isaac con esperanza de que ha encontrado lo que
buscaba y tendrá material para concluir su trabajo.
Rezamos
en la iglesia, luego el rosario paseando y después de la cena se presentan
Chris y Joseph después de un largo vieja. Juntos vemos el partido de fútbol,
final de la copa de África que transmiten en la tele.
La
luz de la ciudad se acaba y funciona el generador que nos permite leer las
noticias y hacer la crónica.
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