Ha llovido algo por la
noche, pero se puede trabajar y seguimos con la faena del pozo negro que tiene
problemas. Viene el constructor, que nos orienta en lo que tenemos que hacer,
pero aquí también habrá que seguir teniendo paciencia, pues el trabajo es
lento.
Estamos todo el
día sin luz. Al final ponemos un rato el grupo electrógeno y cargo la batería
del ordenador para poder escribir y recibir correos.
Siguen los
mismos problemas con la enfermedad. Uba, que ha vuelto de la capital nos dice
que la gente sigue muriendo y por falta de medios y colaboración de la gente que
sigue creyendo en los malos espíritus y los hechiceros…
Sigue lloviendo a ratos y seguimos con la clase de español, que me hace
percatarme del poco ambiente de estudio que tienen los alumnos y la falta de
costumbre de esforzarse en retener y dominar algo que se les ofrece como un
reto, prefieren dejarse llevar y esperar a que otro tome la
iniciativa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario